Hubiera

Es que el hubiera no existe y eso "bien" lo sabemos tú y yo amor. Porque sabemos bien que tantas cosas pudieron no haber pasado. Pero.. a todos ustedes para que entiendan, aquí les va:

Yo no quería andar con él, nuestro primer beso fue más una prueba a mí misma de que me atrevía a hacer lo que fuera. No lo conocía realmente, sabía su nombre... aunque en ese momento era probable que no lo recordara. Después, con el tiempo, sus besos me empezaron a gustar. ¡Joder! Que besaba bastante bien, aunque siempre estuvo sabido que yo besaba mejor.

Mínimo eso decían algunas personas... sí, shhh.. ok?
He besado muchas personas... como sea.

Él un día llegó con una pinche sonrisota de idiota y me dijo que ahora tenía novia. Me enojé mucho pero no podía decirle nada, él y yo ... aparentemente solo estabamos jugando. Aunque a decir verdad, yo ya le había agarrado el gusto a ese juego.

Yo le dije:

"Te odio"

Él se quedó callado unos segundos que me parecieron minutos y después dijo: "¿De verdad? Yo también te odio." Ese fue el momento en el que ambos nos declaramos nuestro amor, y sí, de la manera evasiva que pudimos. Él siguió andando con su novia durante unos meses, las vacaciones llegaron y yo lo agradecí sobremanera. Ahora estaba sola y no tenía que pensar en él.

Al regresar... él quiso besarme... le dije que no podíamos... ustedes saben.... la estúpida novia que funcionaba como obstáculo. No lo hicimos pero con la convivencia un día resultó inevitable. Me dijo que me quería, yo le dije que también lo quería... sha la la laa....

Casi una semana después corto a su novia. En ese momento no noté que había pasado mucho tiempo... pero ahora que lo pienso... algo patán, ¿no? Bueno... quiero aclarar que esto lo digo ahora que me siento enojada o sola.. ¿cómo saberlo?

De cualquier forma, yo le llegué el 29 de febrero. No quisé esperar a que él lo hiciese. Estaba supuesto que lo haría... pero me dio miedo que no sucediese. - ¡Joder! - Le he llegado yo, pensé justo después de haberlo hecho, desde la ventana del auto le grite: "No, mejor ya no".

No me hizo caso y así estuvimos unos meses...
Depués la relación se divide en:

1. La primera puta caída que dolió como mierda (primer engaño)
2. Reconciliación y etapa de armonía (pidió perdón)
3. Aburrimiento (de mí parte)
4. Segunda caída (ok... fallé yo)
5. Petición de perdón (a lo pendejo y llena de lágrimas)
6. Negación de su parte.... (¡joder! que yo si regresé con él)
7. Volver a pedir perdón (ahora con sorpresas: cartas y cosas así)
6. Negación (ok... me emputé)
8. Petición de perdón (de su parte)
9. 11. 12. 13. 14....
Círculo viscioso de peticiones, negaciones, reconciliaciones y rupturas de nuevo
27. Actualidad (chingarnos pero menos... no somos novios, se supone que amigos... ninguno de los dos no las creemos... no queremos. ¡chinga!)

Y bueno, esa es la historia de mi ex novio y yo. El hubiera no existe y bien lo sabemos tú y yo amor. Quiero terminar de la misma forma que empecé la entrada porque debemos creernoslo.

YoSabina