viernes, 14 de octubre de 2011

Corto corto

El día fue hermoso, comenzó con botas amarillas y flores semejantes a las caléndulas. Esas flores simplemente son imposibles de conseguir, ¿sabían?

Los regalos en la mañana, para mí, lo que ya dije arriba, para Colibrí, una cartera (quizá a nadie le importe pero era Coach); primero sólo iba a darle eso, pero no se veía muy emocionado así que en lo que él presentaba examen yo corrí (ok, ok, quizá sólo tomé un camión) a Gandhi y compré The Great Gatsby. Cuando se lo di sonrió muchísimo y fue un hombre más feliz.

Después de clases fuimos a comer al Asian Bistro, después compramos una funda para i-pod y una bolsita interesante para guardar dinero (también para mi Colibrí). Después nos pusimos un poquito sucios y fuimos a una sex shop a comprar insumos. Je, salimos con un dildo nuevo y un anillo para él (que no entiendo muy bien  para qué quiere, insisito en que es puritito ego... ustedes han visto fotos).

Estrenamos las cosas en su casita y luego me vino a dejar a la mía, llevo 30 aquí y ya lo extraño. Yo sé que él es el hombre de mi vida. No les he dicho qué fue lo más importante que me regaló: un poema acerca de nosotros, uno enorme, 5 cuartillas, de puras referencias a momentos nuestros, algunos hermosos y otros no tanto.

YoSabina

2 comentarios:

  1. Ha de ser hermoso tener un poeta de cabecera y que todas sus bellas palabras sean solo para ti y más si son CINCO cuartillas, me desmayo.

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